Gracias a estas capacitaciones, las personas privadas de la libertad pudieron capacitarse artística y musicalmente, debido al trabajo mancomunado entre el SPP y la Escuela de Música.
Esta gestión del Servicio Penitenciario se caracterizó por ser una institución que abre las puertas para trabajar mancomunadamente con la sociedad. A lo largo del año, llevó adelante codo a codo una serie de proyectos con la Universidad Nacional de San Juan.
En esta oportunidad, las personas privadas de la libertad tuvieron un espacio artístico musical y se capacitaron en la temática. A través de la Facultad de Filosofía Humanidades y Artes tuvieron talleres donde se perfeccionaron tanto en la teoría como en la práctica de la música.
Las personas en contexto de encierro recibieron su certificación que deja constancia del cursado y les servirá en el futuro como una herramienta laboral. Las disertaciones a cargo de Carina Silva, fueron avaladas por la Escuela de Música a través del proyecto de investigación “Pensar y Hacer Música en diversidad de contextos”.
Por su parte, la coordinadora Silva comentó que “ha sido un trabajo maravilloso que estamos finalizando en este año, nosotros desde las cátedras de practicas docentes realizamos nuestras intervenciones musicales y pedagógicas en diferentes instituciones de la provincia”. Además, resaltó la apertura del Servicio Penitenciario y dijo que “este año tuvimos la oportunidad de acercarnos por primera vez a un contexto de encierro donde pudimos implementar nuestros talleres con personas privadas de la libertad”.